Somos las personas de 266 kilómetros
que creemos en el futuro de nuestra tierra y que hemos sido
descapitalizadas de recursos, durante las últimas
décadas a favor de las grandes capitales y de otras
provincias de nuestro entorno.
Ahora, pretenden dar un paso más.
Instituciones de Castilla-La Mancha y empresarios de Cuenca
en connivencia con el Ministerio de Transportes para despojarnos
de nuestro ferrocarril, para arrancar sus vías y,
así, cerrar una puerta al transporte de viajeros
y mercancías. Se conjuran, desde sus despachos, para
arrancar uno de los pilares del futuro, el ferrocarril de
la provincia de Cuenca, la 5ª más extensa de
España.
No podemos quedar impasibles ante el atropello
de eliminar una infraestructura tan importante, que vertebra
el territorio, que une a Cuenca, Toledo, Valencia y Madrid,
que forma parte de nuestro patrimonio, que está amortizada
e integrada en el entorno, que es una aliada para el desarrollo
del territorio, además de ser el medio de transporte
más ecológico, económico y sostenible.
Además, desde la Plataforma en Defensa
del Ferrocarril Público y Social de Cuenca y la Agrupación
Pueblos con el Tren, denunciamos que el plan Equis se ha
caracterizado por la falta de rigor y transparencia.
Primero, los datos cocinados, manipulados
y falsos argüidos contra el ferrocarril Madrid-Cuenca-Valencia.
En este sentido, no podemos olvidar a quienes pagamos con
dinero público por disponer de sillones en el consejo
de administración de Renfe. Permitidnos que recordemos
a Miguel Ángel Uriondo, difusor de bulos a golpe
de cuenta de twiter, a María José Rallo, con
sus rancios pensamientos sobre la movilidad y a la ministra
Raquel Sánchez Jimenez, máxima responsable
de un posible desmantelamiento. Cargos a quienes debemos
exigirles responsabilidad por su pésima gestión.
Pero, también, debemos exigir responsabilidades
a quienes repetían las consignas dictadas como José
Luis Martinez Guijarro, Nacho Hernando, Alvaro Martinez
Chana o Darío Dolz.
Servidores públicos que, en todo
el este proceso de imposición, pese a las reiteradas
demandas de la Plataforma y Pueblos con el Tren, se han
negado a dialogar con la ciudadanía.
Denunciamos que, el Plan EquisCuenca carece
de estudios de movilidad interprovincial de las cuatro provincias,
de dotación presupuestaria y que, además,
pretende dar carpetazo a la deuda histórica que tienen
contraída las instituciones con nuestro territorio.
Solo pretende desplazar recursos a favor de las grandes
ciudades. Los pueblos de su trazado no ganan nada. Pierden
una importante infraestructura ferroviaria, ya que el transporte
de bus a demanda, sin ofrecer intermodalidad con el ferrocarril,
es limitado. Más pronto o más tarde, quedará
en nada.
La Unión Europea declaró
el año 2021 como “Año Europeo del Ferrocarril”.
La inacción deliberada del ministerio, de Renfe y
Adif en el ferrocarril Madrid-Cuenca-Valencia y la decisión
de su cierre contraviene las directrices europeas sobre
el desarrollo sostenible y un modelo de futuro encaminado
al transporte de personas y mercancías por ferrocarril,
de las que España se encuentra todavía muy
lejos de los objetivos marcados. El cierre de esta línea
estratégica entre la capital de España y el
principal puerto español, atenta contra los pilares
de la declaración del Año Europeo del Ferrocarril.
La ministra de Transportes, Movilidad y
Agenda Urbana anunció que el Gobierno de España
dispone de 24.200 millones de euros para impulsar la red
ferroviaria española, con una distribución
equilibrada entre la alta velocidad y la red convencional.
Por eso, mientras en otros territorios
se apuesta y se invierte en el ferrocarril, todas las personas
que estamos aquí conocemos las grandes dotaciones
que ser van a realizar en otras provincias, en nuestra línea
no solo no se invierte, sino que se elimina.
Desde la Plataforma en Defensa del Ferrocarril
Público y Social de Cuenca y la Agrupación
Pueblos con el Tren, conscientes de la importancia estratégica,
de futuro y desarrollo para nuestra tierra que supone la
línea de ferrocarril Madrid-Cuenca-Valencia, demandamos:
1.- La retirada inmediata del Plan EquisCuenca.
2.- Rehabilitar de forma integral la
línea Aranjuez-Cuenca-Valencia en un contexto único
de fondos estructurales destinados a impulsar la red ferroviaria
española.
3.- Mantener los trenes objeto de Obligación
de Servicio Público y sincronizarlos con la carretera
para optimizar la intermodalidad del transporte.
4.- Establecer horarios adecuados para
garantizar el transporte de viajeros, que permitan a los
ciudadanos desplazarse a los principales núcleos
de población con regreso el mismo día.
5.- Acabar con los transbordos injustificados
que retrasan el tiempo de viaje en exceso.
6.- Adaptar la línea para el uso
de transporte de mercancías, que permita la unión
entre Madrid, como principal mercado de España,
y el Puerto de Valencia, principal entrada y salida de
mercancías española en el Mediterráneo.
Del mismo modo, fomentar áreas de actividad industrial
a lo largo de la línea.
7.- Aprovechar su valor medioambiental,
histórico-artístico y paisajístico
para proyectos turísticos.
8.- Extender los servicios de Cercanías
de Valencia hasta el municipio de Camporrobles.
9.- Mejorar los caminos de acceso a las
estaciones que se encuentran fuera del casco urbano, para
reducir la distancia a los mismos, así como mantener
las estaciones y, en especial, la de Cuenca en su ubicación
actual.
10.- Crear plataformas intermodales
de mercancías que conjuguen el transporte ferroviario
y por carretera.
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