Portugal suspende la Línea
de Alta Velocidad entre Lisboa y Madrid
Redacción,
28/06/2011
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El nuevo Ejecutivo portugués
ha suspendido, por motivos económicos, el proyecto
de alta velocidad Madrid-Lisboa según consta
en su programa de gobierno que ha presentado hoy en
el Parlamento luso y que se incluye en un paquete de
medidas de ajuste para reducir el gasto público.
En el programa de Gobierno se contempla
esta decisión desde «una óptica
de optimización de costes, a la luz de nuevos
condicionamientos, que deberá tener en cuenta
el estatuto jurídico de los contratos ya firmados»,
aunque contempla su posible revisión en cuanto
a su contenido, coste y calendario. Considera además
que «una eventual renegociación únicamente
podrá proceder de una valoración de este
tipo».
La decisión se toma dentro de
un draconiano plan de ajuste acordado con el Fondo Monetario
Internacional y la Unión Europea, a cambio de
un préstamo de 78.000 millones de euros. El listado
de medidas incluye, entre otras, la privatización
de importantes empresas públicas como la compañía
aérea de bandera TAP, la eléctrica EDP,
las Redes Energéticas Nacionales y uno de los
dos canales de la televisión pública RTP.
El anuncio se veía venir puesto
que el nuevo primer ministro luso Pedro Passos Coelho,
ya desde la oposición, había mostrado
un frontal rechazo a este proyecto debido a su elevada
inversión, que debía salir mayoritariamente
de los fondos estatales.
La decisión supone un jarro
de agua fría para el desarrollo de este corredor
que contará con una estación en Talavera
de la Reina con unas consecuencias impredecibles.
Conocido el anuncio, el ministro de
Fomento, consideró una «mala decisión»
el abandono del proyecto con el fin de ahorrar costes
y recordó que la decisión de Portugal
afectará indudablemente a las decisiones del
Gobierno español, porque la línea que
pretende unir Madrid con Lisboa es una línea
prioritaria dentro de la UE.
Este proyecto cuenta con fondos europeos
y podría afectar a las partidas acordadas para
España desde 2003, y la decisión llega
justo en un momento en el que Bruselas está revisando
las redes transeuropeas.
La entrada en servicio de la línea
alta velocidad entre Madrid y Lisboa estaba prevista
para 2013 y contemplaba, en suelo luso dos tramos. El
más largo, de 150 km Poceirão-Caia, fue
adjudicado en 2010 al consorcio ELOS, encabezado por
las empresas lusas Soares da Acosta y Brisa (participada
por la española Albertis), por un importe de
más de 1.400 millones de euros.
El segundo tramo Lisboa-Poceirão,
pendiente de adjudicar, tiene un coste estimado en 1.900
millones de euros, pese a tener tan solo 50 Km de longitud,
ya que incluye un nuevo puente sobre el río Tajo.
La evolución de este proyecto
sobre suelo español, puede consultarse en la
sección El
PEIT, al Día.
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