A las 10:13 horas
del pasado 27 de julio llegó a Toledo el primer
tren de alta velocidad, en régimen de pruebas,
que cubrirá el servicio entre Madrid y Toledo
a través del nuevo acceso de alta velocidad que
está construyendo el Administrador de
Infraestructuras Ferroviarias (Adif) a la capital
castellano-manchega.
La rama 10 de la serie
104 de la Entidad Pública Empresarial Renfe
Operadora fue la elegida para realizar las
primeras pruebas de funcionamiento de esta infraestructura.
Tras estacionarse en
vía 2, la composición realizó diversos
pases por ambas vías y por los desvíos,
para estacionarse sucesivamente en vías 1 y 3.
Tras hora y media de pruebas, la composición
inició el viaje de retorno a los talleres de
la Sagra.
Según fuentes
consultadas, el calendario previsto es iniciar en agosto,
una vez concluidas las obras de reabilitación
y acondicionamiento de la estación, la recepción
y prueba de las instalaciones, para empezar seguidamente
durante los meses de septiembre y octubre las pruebas
definitivas con material de circulación.
En función de
los resultados de estas pruebas, la línea podría
entrar en servicio comercial antes de que concluya el
año.
El nuevo acceso ferroviario
de alta velocidad a Toledo es una infraestructura de
21 kilómetros con doble vía en ancho internacional
y electrificada que discurre entre el PAET de la Sagra
(línea AVE a Sevilla) y Toledo, en la que se
han invertido cerca de 175 millones de euros y que permitirá
trasladarse entre Madrid y Toledo en menos de media
hora.
El S-104 ha sido
diseñado específicamente para prestar
servicios en distancias medias a alta velocidad prestando
servicio actualmente entre Sevilla y Córdoba,
y Puertollano-Ciudad Real-Madrid, ambas por la línea
AVE Madrid-Sevilla.
Secuencia
fotográfica: Carlos Torres (27 de julio de
2005) |
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